Para las 2:30 de la tarde del miércoles 23 de febrero, la Corte Suprema de Justicia citó al expresidente y exsenador Álvaro Uribe Vélez, a efectos de que declare dentro de la indagación preliminar que se inició contra la aspirante al Senado Piedad Córdoba, por su presunta relación con la extinta guerrilla de las FARC e interferir para la pronta liberación de la entonces secuestrada Íngrid Betancourt.

La magistrada Cristina Lombana fue asignada para escuchar la declaración de Uribe Vélez. 

El nombre de la líder política salió a relucir a raíz de un informe televisivo del Canal Caracol, en el que un exasesor de Piedad Córdoba, identificado como Andrés Vásquez, le dice al periodista que esta manejaba el cronograma de liberación de secuestrados de las FARC con fines políticos.

Entre estos dijo que se opuso a la liberación negociada de Íngrid Betancourt, quien finalmente fue liberada en un espectacular operativo militar.

Piedad Córdoba negó tajantemente los señalamientos, y sostuvo que es objeto de persecución política para entorpecer su candidatura al Senado.

Manifestó que no es la primera vez que esto le sucede, y que en cuanto a las declaraciones de Andrés Vásquez sostuvo que son en retaliación por divergencias que tuvo con él al punto de que lo denunció penalmente.